domingo, 24 de septiembre de 2017

Sombrero de copa - Historia y confección

El sombrero de copa, o sombrero de copa alta,​ coloquialmente llamado galera​  o chistera​, es un tipo de sombrero alto, con la cima plana y el ala amplia usado por los hombres a lo largo del siglo XIX y comienzos del XX, siendo ahora utilizados solamente con etiqueta de día o conjunto formal de noche.

Algunos historiadores de moda dicen que el primer sombrero de copa fue fabricado por el sombrerero inglés John Hetherington en 1797, y que tras lucirlo por primera vez fue detenido por escándalo público -con multa de 500 libras- y las mujeres se desmayaban al verle pasar con una pieza así de brillante.
Por otro lado existe la opinión de que no fué invención de un solo hombre en un momento determinado de la historia, y considerando al sombrero de copa, como cualquier otro complemento del vestir es el producto de una larga evolución. En efecto, los altos sombreros fueron habituales entre los gentilhombres, gobernantes burgueses y clérigos luteranos de los Países Bajos durante el siglo XVII. 
Miniatura - Acuarela y guache sobre vitela. Hacia 1635. 

Se cree que el sombrero alto de copa, tal y como lo concebimos hoy, aparece en Estados Unidos por herencia de los primitivos colonos holandeses en la segunda mitad del siglo XVIII. El embajador de este país en la corte de Luís XVI y futuro presidente de los Estados Unidos de América, Thomas Jefferson (1743-1826), durante su estancia en Francia entre los años 1785 a 1789, popularizó este tipo de sombrero entre la población parisina y pronto será adoptado como prenda sinónima de elegancia prontamente difundida en Inglaterra y por extensión a toda Europa.
El sombrero de copa y alas de fieltro negro, representó ciertamente una novedad en el París revolucionario que pronto va a sustituir los viejos tricornios del antiguo régimen, siendo adoptado por algunos miembros de la convención nacional termidoriana y considerándose  como una prenda renovadora afín a las nuevas ideas traídas por la primera república francesas entre los representantes del directorio y burgueses de las provincias más desarrolladas de Francia.
Caballero época directorio. Hacia 1795.
Miniatura de Henri Pérès ó Pérez, artista español que trabajó en Francia, activo entre 1790 y 1815. 

Se hicieron muy populares en Europa en la década de 1820, fabricados con fieltro hecho de piel de castor, y aumentando en volumen y altura, alcanzando los 20 cm de copa.
1. "El caballerizo Pietro Sailer con sombrero de copa ante un paisaje", c. 1830 (Escuela Italiana- Acuarela y guache sobre papel )- 2. Sombrero de Copa de piel de castor, c. 1832 The Los Angeles County Museum of Art - 3. Sombrero de Copa de piel de castor, c.1820-1825 The Philadelphia Museum of Art- 4. Ilustración de moda, c.1830

A mediados del siglo XIX, el sombrero de copa adopta infinidad de formas y tamaños: versión recta en tubo, altas y bajas de copa, cónicas, de copas plegables, y con frecuencia más altos que la chistera habitual, como lo demuestra un grabado del ilustrador y caricaturista francés J.J. Grandville (1803-1847), autor de diversas series de litografías satíricas.
Grabado de Grandville. Sombreros de copa. En este grabado se pueden apreciar la gran variedad de formas y tamaños que adoptó el sombrero de copa. Un sombrero totalmente popular. Extraído del La moda. Historia del traje en Europa de Max Von Boehn. Tomo sexto. Salvat Editores. Barcelona. 1929. Biblioteca Martínez Lanzas-de las Heras

Más adelante, debido a la influencia de príncipe Alberto de Inglaterra, se popularizó el uso de sombreros de copa realizados en seda. 
La Reina Victoria y el Príncipe Alberto (con sombrero de copa de seda)-
Sombrero de copa de seda, c.1892 McCord Museum Montreal

En las primeras décadas del siglo XIX tambien eran muy usados aquellos realizados en paja o telas mas livianas para el uso diurno, en el campo o actividades recreativas.
1. Ilustración Costume Parisien- 2. Gentleman's Top Hat of Raffia and Silk. French, c.1820 - 3. Top Hat , NYC, c. 1840-1850

El sombrero de copa, varió en su forma y en la amplitud de sus alas a través del tiempo. Entre las décadas de los años treinta y cincuenta del siglo XIX, el alto sombrero de copa era la expresión más convincente de la clase social a que pertenecía.

En el último tercio del siglo XIX, el sombrero de copa dejó gradualmente de estar de moda. Las clases medias adoptaron los bombines y los sombreros de fieltro suaves, que eran más convenientes para la vida en la gran ciudad, así como más convenientes para sus economías limitadas. Su uso se fue restringiendo para los grandes eventos: estrenos de óperas, bailes de sociedad, veladas literarias, carreras de caballos, tomas de posesión de un cargo político, etc. El sombrero de copa necesitaba ser hecho a mano por un experto sombrerero y solo podía estar al alcance de las clases altas de la sociedad. Solo por encargos eran confeccionados para todos aquellos que lo requerían, siempre de ala plana y en seda. Un comercio que poco a poco iba desapareciendo.
Tras el final de la Primera Guerra mundial, el sombrero de copa se había convertido en una rareza en la vida diaria. No obstante, su uso permaneció de manera formal como complemento inseparable del esmoquin o el chaqué, en acontecimientos donde se exigen traje de etiqueta, especialmente en ciertas áreas, tales como la política y la diplomacia internacional.

Durante el tiempo que llevo recreando la moda del siglo XIX, he adquirido un sombrero de copa de fieltro de color negro, que me ha servido para complementar mis atuendos de casi todos los períodos.

Sin embargo para el período romántico preferí incluir en mi atuendo un sombrero con un color mas claro y una copa mas alta. Al no conseguir uno para comprar en Córdoba, me dispuse a realizarlo, tomando algunas ilustraciones y fotografías como modelo e inspiración.

Teniendo en cuenta que no cuento con las herramientas para realizarlo en fieltro (mucho menos en piel de castor), opté por tela. Dado que la seda resultaba muy elegante para el atuendo y por otro lado algo difícil de trabajar, opté por un lino de tapicería.
Al construir un modelo "Recto" realicé tres piezas en entretela: el desarrollo del alto de la copa (al que reforcé con otra capa de panamina), la tapa y el ala al que le calé el fondo.

Para asegurar la rigidez de la estructura cosí aros de alambre por el contorno de la tapa y el exterior e interior del fondo. Luego cosí el desarrollo del alto a los aros de alambre, dejando la costura en la cara posterior del sombrero.
Corté la tela- en este caso lino de tapicería- usando el mismo molde para el desarrollo del alto, la tapa y dos piezas de"alas ", las que cosí a la estructura armada en entretela.

Para cubrir las uniones entre las piezas al borde del ala y en la base de la copa de tela usé bies de algodón marrón.

El forro interior está realizado en raso rojo, recordando un sombrero de copa que ví durante mi visita al Museo Histórico Provincial de Rosario “Dr. Julio Marc” (en el que se exhibe una interesante colección de objetos de la época con la iconografía rosista), cuyo interior estaba forrado en tela de color rojo e incluía un retrato de Rosas en la parte inferior de la tapa.

Impaciente de poder lucirlo, tuve que probármelo terminado, aunque sin el resto del atuendo.


Fuentes:
http://colecciondeminiaturas.blogspot.com.ar/2016/05/historia-del-sombrero-de-copa.html
https://es.wikipedia.org/wiki/Sombrero_de_copa_alta

2 comentarios:

  1. Oye, perdón por el mal español, estoy usando el traductor de Google. Pero, ¿podría preguntar qué tipo de malla usaste para asegurarte de que el sombrero permaneciera levantado y no se cayera?

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  2. Hola! Muchas gracias por tu comentario! En Argentina, el material usado se llama panamina, es un tipo de cañamazo muy similar al tejido empleado para realizar tapices.

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