martes, 1 de junio de 2021

Caballeros en acción: La moda del ocio desde 1860

En el siglo XIX comienza a desarrollarse el turismo, los centros de veraneo y las actividades recreativas relacionadas con el ocio, esto tuvo un gran impacto en la sociedad y, por lo tanto, en la moda.

A medida que la sobriedad y la uniformidad de los tonos oscuros se apoderaban del traje masculino, la ropa para el tiempo de ocio se hizo mas llamativa y reveladora.

Para el ocio y las actividades al aire libre de verano se populariza el uso de prendas de colores claros o blanco, y pasa a ser un símbolo del hombre que no trabaja con las manos. 

"La edad de la Inocencia", 1993. 
Diseño de vestuario ambientado en la década de 1870, a cargo de Gabriella Pescucci. 

Las prendas se adaptaron a la práctica del ejercicio saludable con materiales elásticos como el punto (tejido).

Lawn tennis, 1887. Litografía de Louis Prang & Co. 

Los vendedores de telas y camisas confeccionadas comenzaron a interesarse por la ropa para actividades deportivas como el críquet, remo, montañismo y golf.

Firmas francesas o británicas como Aquascutum y Burberry fabricaban sargas de algodón impermeabilizadas apropiadas para caza, tiro y pesca. En 1879, Thomas Burberry inventa el algodón de gabardina, un tejido transpirable, impermeable y resistente que revoluciona las prendas para la lluvia, hasta entonces pesadas e incómodas. El algodón de gabardina se patenta en 1888.

Los clubes deportivos reunieron empresarios, militares, artistas y escritores en busca de un cuerpo sano en una mente sana. J.M.Barrie , autor de Peter Pan, incluso fundó su propio equipo de críquet en 1887.

El Blanco se impuso para el tenis y el críquet a finales de la década de 1860. El traje se compone de una chaqueta liviana de lino (llamada blazer), pantalón, camisa de algodón y gorra.

Atuendos eduardianos de tenis con bolsillo de parche, plastrón o sobrepuesto, cerca de 1900.

Las casacas o chaquetas se mantienen a la moda, pero surgen nuevas versiones más cortas, que se distinguen del saco por una costura de la cintura. Son de cierre alto, generalmente solo se cerraban con el botón superior, son rectas o no tan entalladas a la cintura, se acorta su largo y redondean abajo. Este tipo de chaqueta pasa a ser de uso tanto para las actividades de la vida diaria, para el ocio como picnics y paseos, y para actividades deportivas, como caza, tiro y montar, variando en sus tejidos, colores e incluso estampados.

Vestuario de "La edad de la Inocencia", ambientado en la década de 1870, Diseño Gabriella Pescucci,1993. 
Traje de lana a cuadros, 1860-1870

Los ternos o trajes de tres piezas que consisten en un saco abotonado con chaleco y pantalones a juego, llamados ditto suits,  crecen en popularidad al finalizar el siglo.

Traje de lana, 1865-1870, Met Museum

Las piernas de los pantalones se vuelven mas anchas y la bragueta recta con botonadura oculta reemplaza definitivamente al alzapón en los pantalones.

El cravat y las corbatas anudadas con nudo de lazo dan paso a la pajarita o corbata de moño, y al plastrón o lazo Ascot .

Ya compartí fotos del vestuario de la película La edad de la inocencia, pero otro diseño de vestuario que refleja maravillosamente la ropa de ocio de fines de siglo XIX es A Room with a view ( en Argentina llamada Un amor en Florencia) de 1985, diseñado por Jenny Beavan y John Bright.

"Un amor en Florencia", 1985. 
Diseño de vestuario ambientado cerca de 1900, a cargo de Jenny Beavan y John Bright.

Enamorado como estoy de estas dos películas y desde el momento que las ví necesitaba un traje de paseo blanco, porque si: D.H. Grantham no es precisamente un hombre que trabaje con las manos.

Inspirado en el vestuario de Newland Archer y un traje de 1865-1970 conservado en el Met, me decidí a diseñar y confeccionar mi traje claro para los paseos de verano.

Cuando emprendí el proyecto estábamos en Fase 1 de aislamiento por la pandemia de Covid-19 (que hubiera deseado me encuentre con algún atuendo del renacimiento italiano, y posiblemente en Florencia, para pasar la cuarentena relatando historias como en el Decamerón, pero me encontró en mi departamento y realizando teletrabajo) por lo que me dispuse a trabajar con materiales que tenía en casa: una gabardina de algodón muy clara.

Utilicé como base para el trazado de patrones un chaqué de "The cutter's Practical Guide"y, basándome en la inspiración del traje del Met, modifiqué los puños, acorté el largo disminuí la curva del pecho y lo hice un poco mas recto para que no se entalle tanto, pero mantuve la costura en en la cintura.

Patrón base para chaqué, The cutter's Practical Guide.

De acuerdo a la inspiración, le realicé ribetes de bies color caqui, y encontré unos botones de hueso con engarce metálico dorado que me encantaron para este atuendo.

Por ser un traje de verano decidí no hacerle chaleco, para tener menos capas de ropa, por lo que se me ocurrió bordar tiradores, detalle que se revelaría al abrirse la casaca. Inspirándome en varios modelos que fui recolectando. 

Inspitación para los tiradores bordados

Utilicé una tela de raso azul noche como base para realizar el bordado. Luego tuve que entretelar, para darle la rigidez suficiente a la tela para brindar soporte a su función de tiradores.


Para sujetarlos al pantalón le hice teminaciones en cuero color suela, que se prenden con botones en la cintura.

Confeccioné pantalones al tono con cintura alta, bragueta al centro, bolsillos a los lados y botamanga doblada.

La camisa, que la había realizado anteriormente para otro atuendo, es de batista blanca, con pechera tableada, para usarse con cuello desmontable tipo Murrayhill (fotos del atuendo) o Hamilton (estilo de cuello que uso en las fotos de la recreación).

El atuendo se completa con spats caqui, pajarita en tonos caqui y beige, y un sombrero de paja toquilla con una cinta caqui decorativa tableada  (estilo Panamá) ,modelo originario de Ecuador, que fué popularizado mundialmente por el presidente de los Estados Unidos de Norteaméica, Theodore Roosevelt en su visita a Panamá en el año 1906.


Si bien aún no he tenido oportunidad de usarlo en un evento de recreación, junto a Madame Skoczynska aprovechamos  nuestra estadía en Tigre, para salir a pasear por la costanera y el Museo de Arte de Tigre, intentando revivir un paseo por la ribera a fines del siglo XIX.

sábado, 14 de diciembre de 2019

Una Noche en la Ópera

Por iniciativa de la adorable Señora Victoria, el grupo de Ladies & Gentlemen decidió asistir en grupo a presenciar una Ópera en el máximo coliseo argentino, me refiero al Teatro Colón.

El programa no podía resultar mas prometedor: Les contes d'Hoffmann de Jacques Offenbach con ropa de gala Eduardiana.
Era prácticamente como viajar a la belle epoque porteña, el tiempo del mayor esplendor de nuestro país.

Cuando surgió la idea yo estaba con ciertos problemas en mi cabeza que me impidieron tomar la decisión de asistir: la organización del evento del décimo aniversario de la Sociedad Victoriana Augusta y mi viaje a París. 
Acercándonos a la fecha de la función, y disponiendo de tiempo para viajar a Buenos Aires, me uní al grupo aunque en otras ubicaciones, puesto que ya no quedaban en paraiso para compartir con el resto del grupo.
Así es que junto con el señor Sebastián (Lord Byron en otras entradas), quien también es miembro de SVA Argentina y Ladies & Gentlemen, decidimos comprar tertulia, pues ya no quedaban muchas ubicaciones disponibles.

Encantado por la idea de desempolvar mi frac, poco tuve que hacer en materia de preparativos de costura, así es que dedique los días previos a la confección de un vestido eduardiano de gala para Madame Skoczynska, quien además sería mi anfitriona en Buenos Aires , brindándome hospedaje.
Tras mi llegada ella se dedicó realizar ornamentos florales y apliques al vestido, mientras yo le confeccioné un "Ridículo".


El sábado 7 de diciembre, llegando a las 19 horas, tomamos nuestro coche rumbo al Colón.
Minutos antes de la función nos reunimos en las puertas del Teatro, y desde allí todo fué 
sorpresa y magia.


Los asistentes estaban perfectos en sus trajes eduardianos, y desde nuestras ubicaciones distantes cruzábamos saludos mientras las luces seguían iluminando la sala y la magnífica cúpula pintada por Soldi.



Pero al apagarse las luces y correrse el telón no solo la música de Offenbach llenaba de magia cada rincón, también la puesta en escena del genio de Eugenio Zanetti nos transportaba a otro universo desbordante de belleza.
Resultado de imagen para los cuentos de hoffmann teatro colon

Finalizó la función y permanecimos en la sala hasta quedar solos, como fantasmas del pasado, recorriendo los pasillos y palcos vacíos, hasta llegar a la calle.



Una vez fuera del teatro improvisamos un fallido intento de cena, para terminar retirándonos a comer una pizza al mejor estilo after 2020, junto a Sebastián y Ana (ya despojados de sus tratos de Don y Madame)... Aunque reinaba la noche, el sueño había terminado al abandonar "El Colón".

"Belle nuit, ô nuit d’amour
Souris à nos ivresses
Nuit plus douce que le jour
Ô,belle nuit d’amour!

Le temps fuit et sans retour
Emporte nos tendresses
Loin de cet heureux séjour
Le temps fuit sans retour." *(1)


Notas:
*(1) ¡Bella noche, o noche de amor!
Sonríe a nuestras locuras,
Noche más dulce que el día,
¡Oh, bella noche de amor!
 
El tiempo pasa sin volver…
Llevándose nuestros sentimientos
Lejos de este feliz lugar.
El tiempo pasa sin volver.




lunes, 18 de noviembre de 2019

Baile celebrando el décimo aniversario de la Sociedad Victoriana Augusta Argentina

La reunión anual de este 2019 fue especial por partida doble.
No solo era nuestro esperado encuentro en el que depositamos todo nuestro esfuerzo e ilusiones, sino también celebramos nuestro décimo aniversario como Asociación cultural avocada a la Recreación Histórica.
Miembros actuales de la Sociedad Victoriana Augusta Argentina

Así es, hace diez años que un grupo de recreadores históricos de la Argentina, reunidos a través del foro de la Sociedad Victoriana Augusta de España, decidieron comenzar a realizar actividades en nuestro país, dando origen a la Sociedad Victoriana Augusta Argentina.
La principal impulsora en nuestro país fue Lady Evangeline Westenra, acompañada por Lord Byron y Miss Georgiana Montblack.
Luego se sumarían, entre otros, Doña Mariana, Mademoiselle Tatiana, y los primeros cordobeses: las hermanas Dashwood y miss Megan O'Conner.
Un año después llegaba el momento de sumarme para aquella hermosa tertulia Regencia, y no pasaría mucho tiempo para que invitara a  Madame Skoczynska y a Monsieur Alekseij Mijailovich Rodchenko (quien aunque con una participación fugaz, resultó memorable), y por suerte se siguen sumando miembros interesados por participar de nuestro grupo.

A lo largo de esta década hemos recreado las modas y costumbres de la sociedad de casi todo el siglo XIX (Solo nos falta el período victoriano tardío, las últimas décadas de ese siglo), por lo que nos pareció ideal celebrar nuestro aniversario en un baile que agrupara todos los períodos y modas que se sucedieron a lo largo del siglo.

Invitación al Baile

Los preparativos iniciaron hace meses y de a poco el evento fué tomando forma, contando con la colaboración de otros grupos de recreación como el Grupo Ladies & Gentlemen, miembros del Tercio de Cantabros Montañeses de Buenos Ayres, decidimos abrir la invitación no solo a otros recreadores sino a cualquiera que le interesara (con la única condición que asistiera con prendas que recreen la moda del siglo XIX).
La convocatoria resultó satisfactoria, y nos emocionó que no solo se interesasen por el evento, sino por las tareas que llevamos adelante en general. En particular nos alegró contar con la presencia de la Sociedad Victoriana Chilena, quienes asistieron aún con el malestar socio-politico por el que está atravesando su país.
Miembros de la Sociedad Victoriana Chilena

Recibir invitados extranjeros y personas que recién estaban conociendo este nuevo viejo mundo resultó un incentivo extra para poner todo nuestro esfuerzo y colaboración en la organización del baile.
Optamos por un Salón en San Telmo, donde ya se había realizado años atrás el Jane Austen Autumn Ball organizado por el Club del libro de Jane Austen Argentina, donde dimos cita a la concurrencia el día domingo 17 de noviembre de 2019 a las 18 horas.

Recepción amenizada por el señor Goussinsky (violín)  

Las caóticas horas previas estuvieron destinadas a la elaboración de los platos y bebidas que se servirían como refrigerio, reunir la vajilla, preparar objetos de decoración y, ya mas sobre la hora, prepararnos con nuestros atuendos.
Para esta ocasión tanto Madame Skoczynska como yo optamos por asistir con atuendos de gala correspondientes al período de la Regencia Inglesa. Sobre mi atuendo ya he hablado en otro posteo, y para Madame S. confeccioné un sobrevestido de tafetán azul con apliques y bordados dorados para usar sobre su vestido beige, el primero que confeccioné para ella.

Al llegar los invitados se los recibió con un brindis y discursos sobre nuestra historia como recreadores y que significa el recreacionismo histórico, invitando a todos a participar de nuestro grupo y eventos.

Luego ingresaríamos al salon principal, para realizar un primer vals entre crinolinas, levitas, vestidos regencia y algo de fru fru eduardiano.


Las mesas para el refrigerio ya estaban servidas asi es que disfrutamos de distintos platillos y bebidas, incluso un delicioso ponche preparado por Miss Marianne Dashwood.

Luego realizamos una sesión fotográfica, las fotografías se enviarían luego como souvenir a los invitados. 
Miembros actuales de la Sociedad Victoriana Augusta Argentina

Grupo Ladies & Gentlemen

Miembros de Tercios de Cantabros Montañeses de Buenos Ayres

Invitados al Baile

No solo ese recuerdo habíamos preparado, sino también un chocolate y una edición conmemorativa de nuestra Columna Augusta.

Edición conmemorativa de "La Columna Augusta"

Miembros de nuestra Sociedad y del grupo Ladies & Gentlemen nos deleitaron con un momento cultural, en el que el señor Boris Ptchelnik Goussinsky interpretó varias piezas con su violín.

La señorita Sol nos elevó ejecutando maravillosos solos de ballet.

La prima donna Ayelén Giammarco interpretó "Voi che sapete" de Las bodas de Figaro de Mozart. 

Luego miembros del Grupo Ladies & Gentlemen  bailaron el Sellenger’s Round, y posteriormente aprendimos todos a realizarlo, unos de los momentos mas hermosos de la noche.

Mientras algunos continuamos bailando, se dispuso una mesa de juegos en otro salón, donde el Señor Goussinsky enseñó a los interesados a jugar al whist, un juego de cartas tradicional y uno de los más antiguos del mundo. Es una práctica con mucha historia y que empezó a surgir en Inglaterra en el siglo XVII.

Acercandonos a la medianoche llegaría el momento del brindis en honor a los diez años de la Sociedad Victoriana Augusta Argentina, y compartiríamos el pastel decorado con flores de ceibo ( flor nacional de Argentina)realizado por Pilar Pellerano, miembro de nuestro grupo.

Reinando la nostalgia, porque la noche nos comenzaba a dispersar, y también un poco de cansancio por el calor, el agotamiento de llevar a cabo tantos preparativos, y un poco también por bailar, uno a uno comenzaron a despedirse los invitados, quedándonos nosotros junto a la puerta al saludarlos, agradeciendo su compañia y deseando que estos diez años se conviertan en muchos mas.

en
 

sábado, 16 de noviembre de 2019

Breeches Regencia

Hoy les presento dos prendas que realicé este año para dos eventos diferentes, pero que formaban parte de un atuendo regencia. La diferencia entre ambos atuendos es que uno debía servir para el día o paseo, y el otro para un baile o gala.
Se trata de Breeches, en español sería algo así como "calzones" pero no se trata de la prenda  que actualmente se considera ropa interior, sino del antepasado directo de los pantalones actuales.
Es una prenda de vestir masculina que cubre el cuerpo desde la cintura hacia abajo, con coberturas separadas para cada pierna, que generalmente se extienden hasta debajo de la rodilla, aunque en algunos casos llegan a los tobillos. Normalmente se ajustaban a la pierna ya sea por botones, un cordón, o por una o más correas y hebillas o broches. 
Ilustraciones de "Costume Parisien"

Formaron parte del vestidor estándar masculino en occidente, dejado de usarse a mediados del siglo XIX en favor de los pantalones o prendas deportivas similares, como las usadas en equitación o esgrima, y perpetuándose como prenda de vestir de niños hasta mediados del siglo XX.
Uno de los principales motivos de que el uso de esta prenda decaiga se debe a que durante la Revolución Francesa, los Breeches ("culottes" en francés) fueron vistos como un símbolo de la nobleza. Los revolucionarios de clase baja se hicieron conocidos como sans-culottes ("sin calzones").
El Culotte , traje de la década de 1770, de la exhibición "Reigning Men: Fashion in Menswear, 1715–2015" (LACMA-Los Angeles County Museum of Art - MAAS Centre for Fashion)- 
"Sans-culotte", pintura de Louis Leopold Boilly 


Los Riding breeches o pantalones de montar fueron creados específicamente para actividades ecuestres, facilitando el movimiento y brindando mas comodidad al jinete. 

Retrato ecuestre del Príncipe Henry, Duque de Cumberland y Strathearn - David Morier,1765
Napoleón cruzando los Alpes - Bernard,Jacques-Louis David, 1801

Tradicionalmente eran ajustados en las piernas y se extendían hasta a la mitad de la pantorrilla donde se sujetaban con hebillas o cordones, y tenían una pronunciada abertura abotonada a través de los muslos que permitía la libertad de movimiento para el jinete. Antes de la invención del fly front (frente de bragueta que conocemos ahora abotonado o con cremallera), se usaban unas solapas abotonadas que cubrían la parte frontal. 
Calzones de seda - siglo XVIII - parte de un traje de novio. 
De la colección Ham House, Surrey. Imagen @National Trust.


Se usaron como traje de noche hasta la década de 1810 con abrigos de cola, y durante el día hasta la década de 1830, y aún un poco mas como traje de corte.

Los breeches aún se usan como parte de la librea, uniforme compuesto por una levita con chaleco, breeches cortos hasta la rodilla, y medias; actualmente lo emplean mayordomos y otros criados en ciertos actos oficiales y para ocasiones especiales en varias cortes europeas. 
Pajes y Cocheros con Librea y breeches, Prinsjesdag, Países Bajos, 2018.

Me basé en unos patrones que encontré, y en una ilustración de la que me gustó mucho el bordado en el frente de la prendedura.

Patrones e Ilustración de "Costume Parisien", 1810

Realizando algunas modificaciones de medidas y ajuste, realicé primero los breeches largos, parecidos a un pantalón.
Para ello elegí una tela de algodón de un tono entre beige y marrón claro, casi un color piel, que junto al blanco, era de los colores mas usados para esta prenda durante la Regencia.

Detalles de la prenda que realicé: 
bordado con cordón y solapas de prendedura

Para este atuendo realicé un chaleco de una tela imitación brocado color rosa con motivos florales, espalda de algodón con fuelle y cintas para ajustar por detrás. 

Tanto en cuello, bolsillos sastre y bordes, le hice un bordado con hilo dorado (tipo cola de rata) con un diseño inspirado en la moda del Imperio francés.

El atuendo se completó con el Froc Coat Regencia color Gris: la primer prenda recreacionista que confeccioné.


Tuve oportunidad de lucir el atuendo completo en la charla para reflexionar sobre la vestimenta utilizada en el período Independentista entre 1780 y 1825, a partir de nuestra experiencia como recreacionistas, realizada en el Museo Nacional de la Historia del Traje en la Ciudad de Buenos Aires, de la que ya hablé anteriormente.



Para el evento anual, y por otro lado celebración del décimo aniversario de la Sociedad Victoriana Augusta Argentina, opté por usar un atuendo Regencia, y como se trataba de un Baile de Gala, confeccioné unos elegantes breeches, realizados en Moiré de seda blanco (muaré en español).


El moiré es​ un tipo particular de textil, tradicionalmente de seda (aunque hay también de algodón o fibra sintética), que posee una apariencia ondeante o fluctuante, gracias a los patrones geométricos formados por la estructura misma del tejido.
Moiré de seda

Al ser un textil delicado y blanco, decidí forrar el interior con raso blanco para evitar que trasluciera. La solapas internas de la bragueta también las realicé en raso blanco. Todos los botones están forrados con Moiré, y le agregué bordados con cordón blanco similares a los anteriores, pero con mas detalles.

Además de los detalles de bordado y botones forrados en el frente, agregué un bolsillo para el reloj, una apertura lateral con abotonadura y correas con hebillas color cobre para ajustar en la pierna, por encima de la pantorrilla, y en la espalda a la altura de la cintura.

El atuendo se completó con el chaleco rosa y el froc coat Gris, al igual que el anterior.

Ambos atuendos fueron complementados por un fob que realicé con furnituras como cadenas y engarces plateados, perlas artificiales, canutillos peltre y un medallón al que le pinté un retrato miniatura de un caballero con un perro.

Como comenté anteriormente tuve oportunidad de lucir este atuendo en el Baile en el que se celebró el décimo aniversario de la Sociedad Victoriana Augusta Argentina, realizado el 17 de noviembre, en un salón en el barrio porteño de San Telmo.